Fridha se descoloca de las actitudes de Diego.
Lo odia un poco a veces, le revientan algunas prácticas acomodaticias y las pequeñeces, sobre todo las pequeñeces. Pero su droga, el encontrarse de modo “casual” reviste de esa relación enfermiza y profunda, extraña y dependiente en la que deciden embarcarse. Podrían como siempre(como todo) tirar todo lejos, olvidarse o simplemente ignorar las pretenciones de una amarra a las muñecas de ambos. Pero como de vez en cuando deciden reirse y comparar el tamaño de un dedo frente al sol, el valor de la bolsa de nuevayork, o simplemente no decir nada, deciden quedarse. Y podrían decidir en cada segundo negaciones y aceptaciones , pero prefieren dejar todo así.Así.
Lo odia un poco a veces, le revientan algunas prácticas acomodaticias y las pequeñeces, sobre todo las pequeñeces. Pero su droga, el encontrarse de modo “casual” reviste de esa relación enfermiza y profunda, extraña y dependiente en la que deciden embarcarse. Podrían como siempre(como todo) tirar todo lejos, olvidarse o simplemente ignorar las pretenciones de una amarra a las muñecas de ambos. Pero como de vez en cuando deciden reirse y comparar el tamaño de un dedo frente al sol, el valor de la bolsa de nuevayork, o simplemente no decir nada, deciden quedarse. Y podrían decidir en cada segundo negaciones y aceptaciones , pero prefieren dejar todo así.Así.
Tan extraña que salieron estas uniones entre artistas